martes, 15 de julio de 2008

ROSTRO ENROSCADO


¿Qué puede pertenecer a mi rostro,
cada año anotando las esquelas de mis hojas,
cada año en ese paseo donde el hielo,
el aire, la lluvia y el sol fermentan,
qué puede pertenecer a mi rostro,
el espejo de las manos múltiples
que tambien viajaron conmigo, la poda,
el arado, los sones de los vasos,
qué puede pertenecer a mi rostro,
aseado por la savia que se arranca
sola, en un milagro de voces y gritos
sedimentadas para camuflarme,
qué puede pertenecer a mi rostro,
tras tantos años encogidos aquí
en esto que se circula como danza del tiempo?



1 comentario:

Churra dijo...

¿Quizas la sabiduria que da tanto tiempo ??'
Un placer