lunes, 29 de agosto de 2011

Recopilando

Poster el que marca el ritme és el desig,
però el desig tan aviat sotmet
com allibera, i mai no concedeix
treves al sentiment o a l'esperança.

Quizá el que marca el ritmo es el deseo,
pero el deseo tan pronto somete
como libera, y nunca concede
treguas al sentimiento o a la esperanza.

Miquel Martí i Pol, Segona proclama, de su libro Después de todo.



Empecé el blog/cuaderno con un hombre entrañable, Leonardo. Un hombre sabio de la tierra. Él mismo me dio esa escoba que yo le pedí. Una escoba con la que no barro, una escoba que reposa en mi casa. Una escoba con vida impresa: todas las semillas que aún no se han desligado de sus ramas. Hay muchas cosas desparramadas tras el blog, muchas personas, muchos encuentros, mucha vida. Eso me gusta, mucha vida. No quiero ni deseo barrer lo desparramado. Ahí queda todo expuesto. Agradeceros todo. No me extiendo más.


Cachivaches

11 comentarios:

virgi dijo...

Alguna semilla hay por aquí, fresca aún.
Besos, Tempero

Inés González dijo...

Debo confesar que cuándo leí esta entrada me dio mucha rabia, de puro egoísmo nomás,al desear y pretender que las cosas no tengan fin. Pero todo se acaba por ser parte de la vida y de los flujos, ríos y mareas, amaneceres y ocasos a la que ella nos somete.
Sé Don Manuel que esto es una despedida, y sé que esta vez es verdad.
Muchas veces a ud le dió el pronto y apagó la luz, y nos dejó en off, en la oscuridad sin su ventana.
Pero al cabo de un tiempo retornó con nuevos bríos, renovado y vital.
Ahora se despide pero deja el registro de esta andadura, de estos largos años de mucha creación y dedicación.
Y no apaga la luz, por eso sé que es verdad...
Respeto su cansancio, su necesidad de sacar la cabeza y beber el aire, de quedarse en silencio porque lo necesita.
Un cuaderno como éste y como tantos otros comprometidos y sentidos insume una enorme energía.
Por eso lo entiendo, y por eso le confieso mi rabia al recibir el impacto, pero eso es un problema mío y de nadie más.
Tempero nos regaló muchas cosas, o por lo menos a mi, que lo conocí por casualidad por un poema de Claudio Rodriguez.
Bebimos música, fotografías, historias de cronopios y famas, poemas de los buenos, gritos desgarradores, dedicatorias, y cuántas cosas más!
Tempero compartió amigos, de esos que no se encuentran a la vuelta de la esquina, de esos que son para siempre y nos llevó a otras ventanas tan exquisitas como ésta.
Tempero fue importante y lo será siempre.
Y no le digo más, he tardado en publicar mi comentario por eso de la rabia, vio?
Pero los egoísmos se superan y se entienden.
Gracias Don Manuel por tanta vida!

Tempero dijo...

Virgi:

las semillas aguantan el fuego. Para eso son semillas. Las emillas perduran, se esparcen. Pero la semilla tiene un fin: germinar. Y cuando germina haya su fin. Semilla y planta. Evidente, ¿no? En las semillas el fin es una transformación. Pues eso.

Besos, Virgi.

Tempero dijo...

Doña Inés:

¿qué tendrá el azar que cuando usted me mandaba el comentario yo estaba enfrascado en la parte I del libro primero del Don de la Ebriedad, de nuestro Claudio.
Pues me lanzo a la parte IX para decirte:

¡Que todo acabe aquí, que todo acabe
de una vez para siempre! La flor vive
tan bella porque vive poco tiempo
y, sin embargo, cómo se da, unánime,
dejando de ser flor y convirtiéndose
en ímpetu de entrega. Invierno, aunque
no esté detrás la primavera, saca
fuera de mí lo mío y hazme parte,
inútil polen que se pierde en tierra
pero ha sido de todos y de nadie.


Invierno, Doña Inés, invierno me vendrá. Invierno me es propicio.

Besos, Negra.

Anónimo dijo...

No t'estime, poeta. Els teus versos
no menen els meus somnis,
no són mans que m'il-luminen les estances
buides d'epifanies i memòries,
ni conjuren els orgues de l'angoixa
amb la suavitat alegre de l'escuma.

Enric Sòria Parra, Somni d'una ombra

Elena, dijo...

La porta que algú ha obert,
la porta que algú ha tornat a tancar,
la cadira on algú s’ha assegut,
el got que algú ha amanyegat.

La fruita que algú ha mossegat,
la carta que algú ha llegit,
la cadira que algú capgirat,
la porta que algú ha obert.

La cadira on algú s’ha assegut,
la carta que algú ha llegit,
la cadira que algú capgirat,
la porta que algú ha obert.

El camí per on algú encara corre,
el bosc que algú travessa,
el riu on algú es llança,
l’hospital on algú ha mort.

Tempero dijo...

Anónimo:

Te completo el poema pero en castellano, si lo quieres en catalán lo añades tú.

Precede el poema una cita en alemán que si quieres traduces, yo no sé alemán.

Die Stumme eine Sprache fand
de F. Schiller

No te amo, poeta. Tus versos
no gobiernan mis sueños.
No son manos que iluminen las estancias
exentas de epifanías y memorias,
ni amortiguan los goznes de la angustia
con la suavidad alegre de la espuma.

En otro tiempo, es cierto, pensaste que los versos
eran como una cifra, una premonición
de más alta belleza en forma de palabras.
Otro mundo quizá, más sabio y más hermoso,
latía en lo hondo de éste, con música secreta
que así se revelaba, finalmente accesible.
No has escrito el poema.
Los dioses que buscabas se ríen siempre lejos
de la frágil y vana humanidad
que los reta o invoca.
Te queda una gavilla de palabras forzosas.
Esas palabras no curan ni acarician.


Un duro poema, sin duda, para un poeta. Yo sólo intento serlo. Y si alguna vez me he considerado poeta te diré que lo que más me altera es extraerme las palabras como algo forzoso.

El poema siempre será un don, una ebriedad.

Gracias por tu texto, seas o no poeta, aunque creo que sí.

Tempero dijo...

Elena:

siempre nos veremos atravesando bosques. Los bosques y la estepa nos son innatos.

Anónimo dijo...

Que llargues, les nit d'hivern,
en certs indrets bells però terribles,
que ens han acollit amb aparent dolcesa:
plou i fa vent i gela impietosament,
i sovint em desvetllo, torbat, a alta nit,
i em reconforta sentir el respir del teu cos jove
que dorm, indefens, contra meu,
.
.
.

El vidre

Àlex Susana

Tempero dijo...

Anónimo:

ójala lloviera y vinieran las largas noches de invierno. Un poema (lo he leído completo, en catalán e intentando adivinar su correcto significado en castellano) lleno de temblor y de dudas.

Yo, a día de hoy, quiero que las hierbas de otoño me arrebaten.

Saludos y gracias.

Luisa Arellano dijo...

Mis momentos ahora son raros, pero lo primero que he encontrado al llegar aquí ha sido esta foto que precisamente por esos momentos raros míos, me ha golpeado la memoria y los recuerdos. Escoba de baelo se llama en mi pueblo y como tantos otros objetos forma parte ya del pasado y es historia de la sabiduría popular.

Gracias por tus palabra de apoyo.