sábado, 24 de septiembre de 2011

Desde mi silla de anea


Tiene la poesía mucho de tránsito y reposo. Pero sobre todo tiene mucha afinidad con la carpintería. Recuerdo a mi padre labrando palos con esa herramienta que conservo: la azuela. Mi padre pulía los palos a medida y a ojo. Y no era carpintero. Yo tampoco. Y a cambio he decidido andar con mi silla a cuestas y afrontar un nuevo proyecto poético a base de lo que llamaré 'asientos'. Pero tendrá entrada en este lugar:





Y mientras, les seguiré dejando por aquí cosas que me gustan mucho como esta seguirilla de Pepe el de la Matrona titulada No duermes sola.

6 comentarios:

Tot Barcelona dijo...

Bien...allí estaremos ¡

Isolda Wagner dijo...

Me gusta la fotografía, pero más todavía la silla de anea con la que te trasladas. Allí nos veremos.
Besos para tu poesía.

Sofía Serra dijo...

La poesía es en el antes de y no esta porque está en el no lugar, como el silencio musical, que da lugar al ritmo de contratiempo. No tiene lugar ni espacio pero los favorece todos, la latencia perfecta...
Un placer haber encontrado este lugar tuyo. te "seguiré" por donde te vea.
Besos

Javier Medel Cabañas dijo...

Vuelvo a pasar esta vecindad y admiro la serena poesía que impregna el hondo sentido de tus palabras, al sumergirte en el ser más allá de la imagen y el uso.
Silla de enea a la fresca de las noches de verano, junto al kiosco de melones, en el solar regado con cubos y palancanas, donde corríamos muchacos, gatos y alguna rata a la luz de la luna y uns tristes farolas.
Vallecas hace medio siglo.

omar enletrasarte dijo...

Gracias a Miguel, he recalado en tu inexperta carpitería.
saludos desde Uruguay

América dijo...

Un cordial saludo.

Sin duda la poesía requiere un proceso emocional distinto,un don concedido a pocos.Intento agregar tu otro blog a mi blogrol pero no lo permite así que sera por aquí que estaremos alerta.

En cuanto a "No duermes sola",estoy segura que he escuchado esa letra por tientos,de mis preferidos pues le sigue una letra tan intensa como:"te voy ha encerrar en un convento que tenga rejas de bronce para que de mi cuerpo no goces"o algo parecido...