domingo, 11 de marzo de 2012

La fuente demediada


A ver,
¿quién partió la fuente por la mitad?

Se fue el agua por cada lado
y el frente que Ella tenía
se quedó parado.


Tangos de Calixto Sánchez de su disco De la lírica al cante.


Hoy las nubes me trajeron,
volando el mapa de España.
¡Qué pequeño sobre el río,
y qué grande sobre el pasto
la sombra que proyectaba!

Se le llenó de caballos
la sombra que proyectaba.
Yo, a caballo, por su sombra
busqué mi pueblo y mi casa.

Entré en el patio que un día
fuera una fuente con agua.
Aunque no estaba la fuente,
la fuente siempre sonaba.
Y el agua que no corría
volvió para darme agua.

Rafael Alberti (Baladas y Canciones del Paraná).

8 comentarios:

Nená dijo...

Es precioso. ¡Qué más da que se partiera en dos, y hasta su quietud! Si como dice Alberti, la fuente siempre suena, y aunque no corra volverá para darte agua.

Beso,

Není

JosepMª dijo...

Fuente partida.
Fuentes exhaustas.
Rios amurallados.
Lluvias exiguas.

Ahora, alguien se pregunta:
¿Podré beber mañana?

Os deseo agua limpia
y lluvia mesurada.
Porqué
una tormenta descerrajada
arrastra todo a su paso
y pudre lo que encharca.

Este deseo, es, sobre todo,
para los que padecen sed.

¡Eh!
Despistados!
O somos solidarios,
o todos los pobres irán
al matadero.
(tal vez, también, algunos ricos)

En el último post
me encandiló Villon
y quedó sin respuesta tu pregunta.
Pues va:
Lo tengo claro.
Intuí, a las primeras,
tu gozo por compartir.

Y ahora necesito comentar
tu apunte sobre uno de mis gustos musicales:
El cante.
(tengo bastantes más)

A veces,
algún amigo
me pilla escuchando flamenco.
y me mira
como si no comprendiera.
Jodidos tópicos:
En Catalunya,
el flamenco es de xarnegos.
No saben lo que se pierden.
Que conste que ya lo apreciaba
antes de entrar en tu web.
Y aquí encontré un tesoro...

Inés González dijo...

Se quedó parado agrietando la carne y las vísceras, secando el deseo insondable como una lengua mustia y sin memoria.

Tempero dijo...

Není, las fuentes son obedientes y obsesivas hasta la extenuación. Volverá, seguro.

Un besuco.

Tempero dijo...

Otra pregunta sencilla Josep, ¿podré beber mañana con solo agacharme?

Ahora me permites, Josep: admiro mucho tu huella por aquí, disculpa si en alguna ocasión no contesto. Ahora deja que juguemos al los buenos poetas. Voy a barajar estos poemas antes de dar de nuevo:

Roberto Juarroz, de su libro POESÍA VERTICAL.

Tú no tienes nombre.
Tal vez nada lo tenga.
Pero hay tanto humo repartido en el mundo,
tanta lluvia inmóvil,
tanto hombre que no puede nacer,
tanto llanto horizontal,
tanto cementerio arrinconado,
tanta ropa muerta
y la soledad ocupa tanta gente,
que el nombre que no tienes me acompaña
y el nombre que nada tiene crea un sitio
en donde está de más la soledad.



Y Ramón Ataz de su buena poesía que aquí encontrarás:

http://elbosquedemnemea.blogspot.com


Clima (El triunfo del bosque)
.


Si irrumpe con tal violencia,
en este instante,
he de decir que su sombra
impulsa otra vez los bosques a la guerra.

Si el calendario colea indeciso hacia el invierno
y solo ahora lo hace,
es de temer la lluvia contingente y sin labranza.

Acaso no sepa ya en qué colina he de dormir esta noche
o si es que el sueño es casual como el invierno.



El próximo tema que incluya de flamenco te lo dedico.

Abrazos.

Tempero dijo...

Inés, dirás que se quedó parada.
Que sepas que mi lengua es vertiginosa y llena de memoria auditiva y habladora cuando pasan los trenes.

Beso.

Carmen dijo...

no Tempero, Inés dijo que se quedó parado y es justamente lo que quiso decir


yo digo que este poema lo había leído antes pero me ha encantado oírlo en esta voz, me encantan las sorpresas que me traen las voces y cuando ya me son familiares me encantan algunos detalles propios y únicos de esa voz y cómo me cuenta a veces incluso lo que no quiere contarme

también digo que me gusta esta serie de fuentes que nos estás regalando

que no nos falte el agua Tempero, que no nos falte la vida

besos

Tempero dijo...

Carmen, parece un galimatías lo que dices en tu comentario. Parece, pues no sin agudeza dices lo que dices.
Cierto, se quedó parado.
No me extraña que hayas leído mucho este poema. Muchos lo son metáfora de mi vida.

Muchos besos, Carmen.