jueves, 4 de mayo de 2017

Las copas que yo bebo

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Ma sœur, côte à côte nageant,
 Nous fuirons sans repos ni trêves 
Vers le paradis de mes rêves ! 

Charles Baudelaire



Algo le pasa a este cielo.
Llenar mi copa no lo hace.
Me desquicia y duermo.
El delirio del vino queda
para mí, para ti,
bajo las piedras del campo.
La urraca pide alegría,
el seco árbol no la entiende.
Trae el arroyo hoy
alas de repuesto para huir.
No sé ya el tiempo
que llevo dormido.




2 comentarios:

Inés González dijo...

En el estar dormido se sueña, y eso es una ventaja; bien lo sabían los orientales que extraían de sus sueños las más bellas de sus obras, y también los surrealistas.
A soñar, Tempero.

Tempero dijo...

Sabes Inesita que sueño demasiado en vida. No queda otra.
Mientras esté borracho de vida seguiré con estas copas.

Beberé por los dos.