lunes, 18 de enero de 2010
Desde una atalaya
Al caleidoscopio vegetal distinguido entre las sombras es al que me dirijo. A lo que se revela como primer punto de calor tras una nevada, a la significante blancura que no demanda redes, a lo abierto del color blanco, a lo que tras el silencio despunta, a lo que irrumpe y no veo, a la persecución que del sol hace la sombra.
Y dirigirse así desde una posible atalaya es lo que nos salva.
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31 comentarios:
¡Qué perfecta la soledad, la blancura, el silencio, la sombra y la luz!
Es una preciosidad esta entrada Manuel, tus reflexiones y las fotos, especialmente la recortada con los fantasmas vegetales irrumpiendo en esa superficie blanca estriada, me fascinaron, la música nos eleva, seguramente buscando esa atalaya para salvarnos.
Un fuerte abrazo
Desde tu atalaya se ven buenos paisajes, se leen singulares textos y se escucha una magnífica música. Completo.
Un abrazo.
Me quedo definitivamente con tu precioso texto y las fotografías.
Me gusta más en silencio. Es precioso.
Besos blancos que no rompan la luz.
Perfecta sencillez de lo auténtico.
Como un amanecer en la estepa. Un saludo.
La belleza autentica esta en lo puro y simple.
La belleza autentica esta en lo puro y simple.
Buen calidoscopio poético:imagen, palabras y música.
http://www.criticadigital.com.ar/index.php?secc=nota&nid=34844
La nieve
es muy fría.
Para ver de lejos
y no tocar.
Esta foto tiene gran belleza,
pero,para mí,
es de un absoluto desamparo...
Sin palabras, ....
Pero estoy, admirando siempre tu trabajo, es bello y muy enriquecedor para los sentidos, para casi todos mis sentidos.
Tempero tiene algo bien rico, "alma, corazón y vida". Es muy emocionante.
"Dirigirse así desde una atalaya es lo que nos salva."
Perfecto.
Un abrazo.
Aislados en la nieve esos árboles cobran peso de símbolo, recortada su imagen en medio de la nada. Menos mal que tu atalaya nos eleva, a punto como estábamos de ser borrados por ese vacío contagioso de la nieve. Desde aquí arriba solo belleza helada, reloj parado.
Me quedo aquí arriba un poco más...
SIEMPRE DISPONDREMOS DE UNA ATALAYA... mientras tengamos memoria.
Besos: PAQUITA
Amando:
Mucha soledad también se puede hallar en el desconcierto, en la grisura, en el ruido y en la penumbra. Pensamos en Haiti. Tu lo has expuesto de modo llagante en tu escrito. Ah, creo que la torre mas alta supera los 800 metros. Me da igual, sigue sin estimularme ese tipo de altura.
Abrazos.
Inés:
esa es la zona que quiero que veamos, precisamente ésa. Hay entradas en las que pienso directamente en ti como creadora plástica. Y sé de antemano que acierto. me alegro que disfrutes.
Abrazos.
Pepe Gonce:
Trato, cuando hago una entrada, que no chirríen los goznes del buen gusto. Ya sé que es poca cosa lo que hago, pero me agrada. Y aún así lucho por completar.
Abrazos.
P.D. No creas que me olvidé del aceite, si me dices en un correo privado dónde trabaja tu hijo le doy la/s botellas a él para que te las haga llegar. Y algo de música también.
Isolda:
Lang Lang es una gozada también. Esos toques de música china que tiene su disco le da un gusto muy personal a la música clásica tan rigurosamente encorsetada, lo cual no quiere decir que el piano solo no me agrade. Y mucho.
Besos del colorín que desees.
Mateo:
Sencillez y autenticidad son mis constantes. Si sigues por aquí lo verás. Y más que autenticidad diría yo el no falseamiento de las cosas.
¡Ya me gustaría conocer a mí un amanecer en la estepa!
Saludos.
En menudo terreno te metes aseverando con esa rotundidad sobre la belleza. En lo de simple estoy de acuerdo. En lo de la pureza ya puede que tengamos que establecer las coordenadas de lo puro y lo impuro. Hay contrastes horrorosos y feos que a veces me fascinan por cómo han llegado a colocarse o por la reflexión que me provocan. Pero imagino por dónde vas.
Shandy:
Tus deseos serán satisfechos: Schubert entrará a escena.
Besos.
Josep María:
Para mí es sobrecogedora la composición, Josep.
Para mí, los incendios sí son bellos fotográficamente por su azarosas formas. Y el desamparo que me producen es descomunal.
En este caso, la soledad me parece enriquecedora y creativa, me parece, no sé, lo que dije al principio, perfecta.
Esta otra soledad de la grisura y de la muerte, es destructiva.
Más de ochocientos metros es impresentable...
Guadalupe:
¿Aún en silencio tengo algo bien rico, alma, corazón y vida?
Con palabras, milleiros.
Ybris:
Hay frases en las que dar con su intención y su tino me cuestan. Ésta fue una de ellas, te lo aseguro. A mí me pareció buena, aunque tenía mis recelos sobre lo que pudiesen entender respecto a la salvación. Ojo, en el sentido más laico posible.
Abrazos.
Alicia:
En el fondo la mirada aisla y más aquí en Madrid. Conozco muy bien su extrarradio, sus desórdenes y sus miserias. Y te diría que a escasos 200 metros a la derecha de esos árboles aislados hay una espantosa fábrica de vigas descomunales, de esas que se utilizan para los puentes. Pero yo aislé y me emocioné con la vista. Para tener esa vista sólo has de ir a Rivas pueblo dirección laguna del Campillo.
Paquita: me lo pones a huevo. ¡Claro que tengo yo una atalaya en la memoria! En Segovia, cerca de la Granja de San Ildefonso está un paraje a unos 1500 llamado la Atalaya. Las vistas desde allí son espectaculares. Eso sí, la colocaron unas antenas horrorosa hace unos años.
Besos.
Amando:
en esa otra soledad solo procede ayuda. La literatura para los ratos libres. Pero mira Defoe con su libro sobre la peste.
Obvio que si
La atalaya siempre fue el mejor sitio desde donde avistar y hacerse fuertes.
Me quedo con la segunda foto, preciosa, esos árboles dueños de sus sombras en el blanco inmaculado.
Tesa:
Una palabra que quizá aborde y que vi en una inscripción referida a una atalaya desde la que se veía el Mediterráneo: matacán. ¿Sabes lo que es?
Ahora ya sí lo sé.
:)
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